Llegas a casa después de otra reunión que no fue a ninguna parte.
Abres LinkedIn y ves a la gente presumiendo de sus "soluciones innovadoras para empresas" y piensas... ¿en qué momento me quedé atrás?
Tío, si estás buscando un nicho que de verdad necesite ayuda, que tenga un problema real y que esté dispuesto a pagar por solucionarlo, deja que te cuente algo que descubrí hace poco.
Los restaurantes están desesperados. Y no, no exagero.
Hablé con 17 dueños de restaurantes el mes pasado. ¿Sabes cuál era su problema número uno? Las llamadas perdidas. Reservas que se esfuman porque nadie puede coger el teléfono durante el servicio. Clientes que llaman a las 11 de la noche cuando ya han cerrado.
Un restaurante medio pierde entre 5-10 llamadas al día. Si cada llamada es una reserva potencial de 4 personas con un ticket medio de 25€... haz las cuentas. Estamos hablando de miles de euros al mes que se van por el desagüe.
Y aquí viene lo interesante: casi ninguno tiene una solución decente. Los más avanzados usan sistemas de reserva online, pero ¿y las preguntas? ¿Y los clientes que prefieren llamar? Ahí hay un agujero enorme.
Yo venía trasteando con Vapi, ElevenLabs y N8N por mi cuenta. Una tarde se me ocurrió: ¿y si creo un agente telefónico que suene natural, que pueda gestionar reservas y responder preguntas básicas?
El primer prototipo era bastante cutre, no te voy a engañar. Pero funcionaba lo suficientemente bien como para enseñárselo a un restaurante local.
Su reacción: "¿Cuánto cuesta y cuándo podemos empezar?"
Sin presentación fancy. Sin powerpoint. Solo una demostración rápida y ya querían contratarlo.
Después de varios meses perfeccionando el sistema, ahora tengo 7 restaurantes pagando una cuota mensual por este servicio. No es que me haya hecho rico, pero oye, es un ingreso recurrente por algo que, una vez configurado, requiere muy poco mantenimiento.
Lo mejor: el coste de operar este sistema es mínimo comparado con lo que cobro. Los márgenes son brutales.
He decidido compartir exactamente cómo lo he montado todo en un tutorial en YouTube. Son más de 6 horas donde te enseño paso a paso cómo configurar Vapi para gestionar las llamadas, cómo crear una voz que suene natural con ElevenLabs, y cómo usar N8N para conectarlo todo en un sistema automático.
¿Por qué lo comparto? Porque el mercado es enorme. Hay miles de restaurantes ahí fuera y todos tienen el mismo problema. No me preocupa la "competencia" porque la mayoría de la gente no se molestará en aprender y aplicar esto de todas formas.
Este no es un negocio hipotético. Es algo que estoy haciendo ahora mismo y que funciona. Sin inversiones locas, sin contratar a 20 personas, solo tecnología bien aplicada a un problema real.
Los restaurantes necesitan esto. La pregunta es: ¿serás tú quien se lo ofrezca o dejarás que otro lo haga?